¿Por qué comemos fresas secas?

•Rico aporte nutricional: Las fresas deshidratadas están repletas de nutrientes como vitamina C, vitamina E, caroteno, fibra dietética y minerales como potasio, magnesio y hierro. La vitamina C puede fortalecer el sistema inmunitario y estimular la síntesis de colágeno. La fibra dietética promueve el peristaltismo intestinal, previniendo eficazmente el estreñimiento.

•Potente efecto antioxidante: Contienen antioxidantes como antocianinas y catequinas. Estas sustancias pueden neutralizar los radicales libres en el organismo y reducir el daño oxidativo, lo cual es beneficioso para el antienvejecimiento y la prevención de enfermedades cardiovasculares.

•Protección visual: La vitamina A y el caroteno presentes en las fresas deshidratadas pueden sintetizar rodopsina en la retina. Esto ayuda a mantener una visión normal y a prevenir la ceguera nocturna y el síndrome del ojo seco.

•Aporte energético suficiente: Las fresas deshidratadas contienen una cierta cantidad de carbohidratos que el cuerpo puede convertir en glucosa. Esto aporta energía al cuerpo y ayuda a aliviar la fatiga.

 

Aunque las fresas deshidratadas ofrecen muchos beneficios, debido a su alto contenido de azúcar, su consumo excesivo puede provocar problemas como niveles altos de azúcar en sangre y aumento de peso. Por lo tanto, es fundamental disfrutarlas con moderación.
Elaboración de fresas deshidratadas con equipo de secado: métodos y ventajas

I. Método de producción

1. Prepare los materiales y el equipo: Fresas frescas, equipo de secado, sal, agua,

2. Lave las fresas: Coloque las fresas en agua limpia, agregue una cucharada pequeña de sal y déjelas en remojo durante 15 a 20 minutos para eliminar las impurezas de la superficie y los residuos de pesticidas.

3. Procesar las fresas: Cortar las fresas en rodajas uniformes de entre 0,3 y 0,5 cm de grosor. Esto garantiza un calentamiento uniforme durante el secado y acelera el proceso.

4. Configure los parámetros de secado: precaliente el equipo de secado durante 5 a 10 minutos y configure la temperatura a 50 - 60°C. Este rango de temperatura puede retener mejor los componentes nutricionales y el sabor de las fresas, al tiempo que evita que se quemen en la superficie debido al exceso de temperatura.

5. Proceso de secado: Extienda las rodajas de fresa cortadas uniformemente sobre las bandejas del equipo de secado, evitando que se superpongan. Coloque las bandejas en el equipo de secado; el tiempo de secado es de aproximadamente 6 a 8 horas. Durante el proceso, observe el grado de sequedad de las rodajas de fresa cada 1 o 2 horas y gírelas adecuadamente para asegurar un secado uniforme. Cuando las rodajas de fresa estén secas, endurecidas y hayan perdido la mayor parte de su humedad, el secado estará completo.

 

II. Ventajas

1. Eficiente y práctico: El equipo de secado puede completar la producción de fresas deshidratadas en un tiempo relativamente corto, ahorrando considerablemente tiempo y costos de mano de obra. En comparación con el método de secado natural tradicional, no está sujeto a las condiciones climáticas ni del lugar, y puede producirse en cualquier momento.

2. Calidad estable: Mediante un control preciso de la temperatura y el tiempo, el equipo de secado garantiza que cada lote de fresas deshidratadas tenga un secado uniforme, con un sabor y una calidad estables. Esto evita problemas como el secado irregular o el moho causados ​​por las variaciones climáticas durante el secado natural.

3. Retención de nutrientes: Una temperatura de secado adecuada maximiza la retención de nutrientes como la vitamina C y la fibra dietética en las fresas. Las investigaciones demuestran que la tasa de retención de nutrientes en las fresas deshidratadas, obtenidas con equipos de secado, es significativamente mayor que la de las fresas deshidratadas de forma natural.

4. Higiénico y seguro: El equipo de secado seca en un ambiente cerrado, lo que reduce el contacto con contaminantes como el polvo y los mosquitos, garantizando así la higiene y seguridad de las fresas deshidratadas. Además, la alta temperatura durante el proceso de secado también puede tener un efecto bactericida, prolongando la vida útil de las fresas deshidratadas.